martes, 22 de enero de 2008

SKODA SCOUT (entre berlina y todo-camino...)




El Skoda Scout es un coche interesante por su precio y funcionalidad.
Fuera de carretera, está limitado por las ruedas (son de asfalto) y por la altura libre al suelo (no suficiente si tenemos que pasar por un camino en mal estado). Lo que si viene muy bien es su tracción a las cuatro ruedas.
Está disponible con dos motores, un Diesel de 140 CV (27.350 euros) y un gasolina de 150 CV (28.020 euros).
Posee una suspensión dura y las irregularidades o asfalto rizado se perciben con nitidez en el interior. Aparte de esto es un coche ruidoso por motor y suspensión, que puede llegar a ser molesto en viajes largos.
El interior del Scout posee materiales de calidad media y un ajuste bastante cuidado, y en esta versión, comparandolo con la version Combi 4x4, tiene especificaciones propias (tapicería y alfombrillas específicas para los asientos, pedales de aluminio y un asidero para el acompañante sobre el salpicadero).
Por fuera es ligeramente mayor que un Octavia Combi 4x4 en todas sus dimensiones: mide 4,58 m de largo, 1,78 m de ancho y 1,53 m de alto. Por dentro es igual.
El Scout lleva un buen equipamiento como pueden ser los seis airbags, el control de estabilidad (ESP), el climatizador de dos zonas, el retrovisor interior antideslumbrante automático, el ordenador de viaje, los mandos multifunción en el volante, los limpiaparabrisas automático, el encendido automático de faros, el programador de velocidad, la radio CD compatible con discos MP3, la conexión auxiliar para fuentes de sonido externas y las llantas de aleación de 17 pulgadas.
Opcionalmente puede tener faros de xenón, tapicería de cuero, techo solar eléctrico, sensores de aparcamiento, cargador de CD, navegador y conexión Bluetooth para teléfono móvil.


En conclusión es un buen sustituto para un todo-camino ligero y además con un buen equipamiento...

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